LIDERAZGO EN SEGURIDAD Y SALUD EN EL TRABAJO, UN IMPERATIVO EN LA GESTIÓN.

En el escenario empresarial actual, la figura del líder en seguridad y salud en el trabajo adquiere una dimensión estratégica que va más allá de la mera aplicación de la normativa técnica. Su papel se convierte en esencial para la construcción de un entorno laboral seguro, saludable y propicio para el crecimiento personal y profesional de los empleados.

Un líder eficaz en este ámbito se integra directamente en el equipo, comprendiendo las necesidades y desafíos diarios de los trabajadores. Ser parte del grupo no solo fortalece la conexión personal, sino que también fomenta un ambiente donde los empleados se sienten escuchados y respaldados, contribuyendo a un mayor compromiso y cumplimiento de las normas de seguridad.

El compromiso con la excelencia en seguridad y salud establece un estándar elevado, no solo en términos de cumplimiento normativo, sino como una cultura arraigada en la organización. Liderar con el ejemplo refuerza este compromiso, inspirando a los empleados a seguir prácticas seguras y saludables.

El servicio al trabajador se manifiesta de manera tangible a través de este liderazgo. Al ofrecer programas de bienestar, asesoramiento en salud mental y acceso a recursos para mantener un estilo de vida saludable, se demuestra un compromiso genuino con el cuidado de los trabajadores que va más allá del entorno laboral. Además, cuando se brinda ayuda de manera individual a un trabajador, este nunca olvidará el servicio ofrecido, lo que permite que el afecto arraigue y fortalezca la conexión entre el líder y el equipo.

La importancia del orden y la perseverancia no solo radica en mejorar la seguridad, sino también en crear un entorno organizado y eficiente. La adaptabilidad a los cambios y la capacidad de anticipar y abordar proactivamente los riesgos son fundamentales para mantener un entorno laboral seguro y saludable en constante evolución.

La comunicación clara y transparente se erige como un pilar fundamental. Un líder en seguridad y salud en el trabajo debe comunicar de manera efectiva políticas, procedimientos y riesgos para garantizar la comprensión general y el compromiso de los empleados.

La evaluación continua y la búsqueda de mejora son características esenciales del liderazgo efectivo. Fomentar la cultura de la retroalimentación y la revisión constante de los procesos de seguridad permite identificar áreas de oportunidad y superar los estándares existentes.

Incentivar positivamente el compromiso y la excelencia en seguridad y salud, a través de reconocimientos y programas de recompensas, contribuye a fortalecer la motivación y consolidar la cultura de seguridad.

Promover la construcción de resiliencia psicológica se vuelve un componente crucial. Un líder efectivo en este contexto respalda la salud mental de los empleados mediante el apoyo emocional, la gestión del estrés y la creación de un entorno que valore la salud mental tanto como la física.

En conclusión, el liderazgo en seguridad y salud en el trabajo va más allá de cumplir con la normativa; este implica construir un entorno donde los empleados se sientan capacitados, respaldados y motivados para contribuir a su propio bienestar y al de la organización. Integrar prácticas de liderazgo que fomenten la comunicación, la adaptabilidad y la mejora continua creará un cimiento sólido para un entorno laboral seguro, saludable y propicio para el desarrollo integral de los trabajadores.

Prof. Dr. Franz Guzman Galarza.
Docente Investigador.
Presidente del Colegio de Profesionales de Seguridad y Salud en el Trabajo del Ecuador.