Plataforma Laboral Life
Un reconocido autor estadounidense Lee Saxby, en una de sus célebres frases, afirma que los demonios del Siglo XXI son las sillas y los zapatos, puesto que no estamos diseñados ni para estar sentados (al menos muchas horas) ni para llevar zapatos, sino para movernos de manera activa, lo que conlleva a ciertos ajustes desde el Sistema Nervioso para sobrevivir en estos contextos. Estos ajustes se traducen desde rigidez, reducción de la movilidad articular o incluso dolor, siendo el preludio de un futuro problema de mayor envergadura.
Es impensable, al menos desde nuestra cultura occidental, suprimir sillas o calzados por lo que es necesario tomar medidas para que el cuerpo funcione de la mejor manera posible, lo que viene siendo informar al sistema nervioso desde todas las estructuras que todo funciona correctamente y para ello es necesario una activad activa de la musculatura implicada.
En todas las formaciones de ergonomía se habla se los microdescansos o microbreaks que son necesarios para movernos cada 40 minutos, ve a la fotocopia aunque no tengas que ir, anda hacia una ventana, muévete y camina aunque no lo necesites pero ¡¡MUÉVETE!!.
¿Suena bien verdad? Moverse para no tener los típicos problemas de espalda, contracturas etc… pero, sabes de sobra que el mundo ideal no es el mundo real y cuando nos metemos a trabajar y trabajar y nos centramos en un proyecto, en acabarlo cuanto antes se olvida muchas veces estas micropausas, el levantarme etc… y pasan horas, días, semanas, meses y años y no hemos hecho ni una micro pausa intencionada.
Es en este momento cuando tu Sistema Nervioso, fiel amigo tuyo y defensor de tu integridad, buscará soluciones para que no se lastime más tu espalda, hombro, codo o muñeca y querido compañero una de esas soluciones puede ser un dolor o una contractura y es que tu sistema nervioso te quiere tanto que hace eso para avisarte de que algo no va bien y que le hagas caso, que te levantes, que busques contraer esa musculatura que lleva mucho sin contraerse y que vuelvas de alguna manera al origen del funcionamiento del músculo, que no es otro que contraerse de manera activa.
Espalda y Salud