Plataforma Laboral Life
No somos conscientes del nexo entre la calidad de la vida laboral y la productividad. A menudo te encuentras que las empresas se preguntan cómo se puede mejorar la productividad de los empleados, motivarlos, para que su producción sea mayor o simplemente, más eficiente y comprometidos con la Compañía y ellos mismos tienen en sus manos las soluciones, pero ni si quiera se las plantean o piensan que necesitan muchos recursos económicos o humanos para su implantación, cuando realmente, y en la mayoría de los casos, se traduce en una escucha activa de sus empleados y, llevar a cabo pequeñas acciones, que aunque puedan suponer un “gasto” con el que no contabas, reportan más beneficios de los que se pueden imaginar.
Un empleado en este caso, con calidad de vida laboral, será más productivo, como suelen decir algunos “siente los colores” de la empresa y estará más comprometida con ella.
Pero a ¿qué nos referimos con calidad laboral??? ¿Qué es esto??? ¿Qué quieren los trabajadores? Pues es muy sencilla la respuesta, que se les escuche sus necesidades, no ser autómatas del trabajo. Voy a trabajar porque tengo que cubrir necesidades, pero no me implico, produzco y me voy.
Una vez me comentaron que los trabajadores son “Mercenarios del trabajo”, esa expresión cuando la oí, me impactó, porque nunca me había planteado el trabajo de esa manera y te hace mirar alrededor y a ti mismo.
Tenemos que evolucionar con los tiempos y el COVID, que todavía sigue presente, hizo que muchos trabajadores se replantearan sus situaciones laborales y valoraran la calidad de vida laboral que repercute directamente en la calidad de vida personal. Influye como te sientes en el trabajo, como te tratan, si tienes un problema y se te escucha o simplemente, no le importa a nadie. Se pasan en el trabajo horas, en las que los trabajadores demandan encontrarse bien. Esa flexibilidad horaria, que no es trabajar menos horas (como piensan muchos), sino dar margen de entrada y salida (un ejemplo); el teletrabajo, tan de moda y en auge que se puso con el COVID, ¿dónde ha quedado?, es parte de esa flexibilidad; conciliación de la vida laboral y familiar, ¿qué es eso? se preguntan muchos, si eres padre o tienes personas a tú cuidado, casi te miran como un trabajador que les vas a crear problemas, cuando no es así, sólo necesitas flexibilidad, poder gestionar, poder conciliar; desconexión digital, hay vida después del trabajo, y no se necesita tener una familia que te está esperando, eso es muy antiguo, somos personas no máquinas y cuanto más cansado se está, más errores se cometen, es necesario el descanso.
En algunos casos, empresas se han adaptado a las nuevas demandas de los trabajadores, porque esos trabajadores que empezaban trabajando en una empresa y se jubilaban en ella, ha pasado a la historia. Donde el “boca a boca” hace mucho y están pendientes si salen ofertas laborales en esas empresas, para solicitarla, ya que “en esa empresa están comprometidos con los empleados” o “te tratan bien”.
Con las nuevas tecnologías de las que disponemos, a un clic, en tu teléfono u otro dispositivo, tienes información de la empresa, reseñas de empleados o clientes, con lo cual ya dispones de información para saber si la empresa es “buena o mala” con sus empleados.
En las empresas, nada más entrar, con el ambiente que haya, sabes lo que te vas a encontrar. Nunca me olvidaré, cuando trabajaba como Técnico de PRL de un SPA, visité una empresa, donde el responsable de ella en la isla, si no estaba, cerraba la puerta de su despacho con llave (y no la dejaba en la empresa) y si se encontraba en ella, estaba trabajando con la puerta cerrada. La persona que me acompañaba en la visita estaba deseando que se jubilara, puesto que creaba muy mal ambiente en el centro de trabajo, creando un entorno laboral desagradable.
También es necesario que no se suponga que el “responsable” lo está haciendo bien, en esa escucha activa de tus trabajadores, tienes que ver si las personas en las que estás delegando, están creando “equipo”, están fomentado el bienestar de los empleados.
El trabajador ya no sólo va en la búsqueda de la estabilidad laboral, busca calidad de vida laboral, que repercutirá en ellos en calidad de vida personal y en la empresa en mayor productividad y mayor compromiso con la Compañía. Ya no les “pesa”, a los trabajadores, o se les hace “pesado” cambiar de empresa, se van sin más, buscando esas ansiadas mejoras, esa ansiada calidad.
Cuando una empresa tiene mucha rotación de personal o simplemente “mañana no vengo”, tiene que analizar, que no le está dando a sus empleados y sí sus competidores. No es sólo el sueldo, incluso se ha puesto de muy de moda el “sueldo emocional”, tienes que hacer la reflexión: ¿se sienten bien mis colaboradores? Fíjate que ya no hablo de trabajadores, sino de colaboradores. Hay que cambiar el concepto, esa persona está colaborando conmigo, está ayudando a que el proyecto (Empresa) funcione y siga adelante, no es simplemente un trabajador, es parte del proyecto. Ahí es donde empieza el cambio.
Mª Isabel Rodríguez Garrido
Técnico Superior de PRL